sábado, 20 de junio de 2009

Las Veladas en la Pinada

Gençana solía organizar veladas donde invitaban a los padres, los niños estaban prohibidos porque corrían, jugaban y hacían ruido, cosas que molesta mucho, a veces es porque de verdad era cosas destinadas por completo a los adultos.

Aquellas veladas eran maravillosas: noches de jazz, recitales, marionetas para adultos…

Las veladas estaban “financiadas por el AMPA”, así que si no eras socio, debías dar una pequeña aportación a modo de entrada, es lógico, es lo que se suele hacer en todos los colegios, si no eres socio dedes pagar por la actividad.

Ponían mesitas con velas. Al fondo cerca de la casa antigua -donde están las oficinas- colocaban una mesa grande con diferentes bebidas alcohólicas (ginebra, whisky…), refrescos, vasos y hielo. Quien quería tomarse un cubata, se acercaba a la mesa se lo servía él mismo y en una cajita se ponían unos 3 euros por cubata. Esta gente busca el negocio por todos lados.

Disfrutabas de la velada con el tintineo del hielo en el vaso, bebiendo un cubata “barato”, en el jardín del colegio, que seguramente no tenían licencia para vender alcohol.

Luego, además, pasaban el cepillo para recaudar más dinero porque, según ellos, no les llegaba para pagar a los artistas.

Como añoro las veladas, sobre todo cuando el vecino nos mojaba porque estaba cansado de tanto ruido entre semana y cerca de la media noche.

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